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En el año 2023, México experimentó un hito en el ámbito económico al registrar ingresos por remesas que alcanzaron la cifra récord de 63 mil 313 millones de dólares, según datos proporcionados por el Banco de México.
Aunque el ritmo de crecimiento se desaceleró en comparación con el año anterior, estas remesas continúan siendo un pilar crucial para las familias receptoras en el país.
En promedio, las familias beneficiarias recibieron alrededor de 393 dólares a lo largo del año, apenas tres dólares más que en 2022.
Este incremento modesto se vio afectado por un dólar débil frente al peso, reduciendo su poder adquisitivo y destacando las complejidades del entorno económico global.
A pesar de la desaceleración, el monto total de las remesas enviadas por connacionales desde el extranjero, especialmente desde Estados Unidos, mostró un crecimiento anual del 7.55 por ciento, aunque menor al impresionante 12.08 por ciento registrado en 2022. México se consolidó como el segundo receptor de remesas a nivel mundial, solo detrás de la India, según el Banco Mundial.
En diciembre, un mes caracterizado por los gastos asociados a las festividades navideñas, las remesas alcanzaron los cinco mil 490 millones de dólares, representando un aumento anual del 2.1 por ciento y un incremento del 11.7 por ciento respecto a noviembre.
Del total de recursos recibidos durante el año, el 99 por ciento ingresó al país a través de transferencias electrónicas, sumando 62 mil 649 millones de dólares.
Las remesas en efectivo y especie constituyeron el 0.8 por ciento con 526 millones de dólares, mientras que las transferencias mediante money orders representaron el 0.2 por ciento con 138 millones de dólares.
A pesar de las expectativas de una desaceleración económica en Estados Unidos, analistas prevén un continuo crecimiento en el envío de remesas durante este año, aunque a un ritmo más moderado.
