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Petróleos Mexicanos (PEMEX) emitió un comunicado aclarando que la fuga registrada en los campos Ek Balam se encuentra completamente reparada, desmintiendo las afirmaciones sobre un supuesto gigantesco derrame de petróleo divulgado por algunos medios de comunicación como una estimación maliciosa.
Según el comunicado, la red de ductos en los campos Ek Balam llegó al final de su vida útil de 30 años, por lo que la compañía procedió a cambiarla por una nueva red como medida preventiva. Este cambio generó dos puntos de fuga en el ducto debido a pequeñas fisuras de aproximadamente 7 cm de longitud por 1 mm de ancho y un poro de 1.2 cm de diámetro.
“Dado lo reducido de las grietas, el volumen de hidrocarburos que se fugó fue mínimo. (…) La mayor parte del volumen derramado se recuperó de manera inmediata y la iridiscencia se dispersó”, aseguró la empresa.
En relación con las informaciones difundidas por diversos medios, la empresa estatal detalló que el área de la mancha de aceite de 400 kilómetros, reportada por algunos medios de comunicación, es una estimación malintencionada.
Según PEMEX, para que esta estimación fuese cierta, tendrían que haberse derramado más de un millón y medio de barriles de petróleo, sin embargo, el volumen real del derrame, reportado por los especialistas de PEMEX, fue de 58 metros cúbicos, equivalente a 365 barriles de petróleo, afectando un área estimada de 0.06 kilómetros cuadrados con un espesor de película de aceite de aproximadamente un milímetro. Esto significa que las afectaciones reportadas en los medios son seis mil veces mayores que las mediciones realizadas por la empresa.
PEMEX también subrayó que el derrame fue reportado inmediatamente a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y a la Secretaría de Marina (SEMAR), y se procedió a su reparación, asegurando que la situación está totalmente controlada. Además, con el cambio a una nueva red de ductos, se eliminará definitivamente la posibilidad de futuras fugas de aceite.
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